Casada als, aquesta autora viu a Brisbane, una ciutat de 2 milions d'habitants al nord-est del d'austràlia. que ja ha aconseguit milions de lectors i que ha estat traduïda a 50 llengües.
En
resumen, “La hija del relojero” es una novela correctamente redactada,
de
estructura caótica, con una finalidad confusa que no tiene mucho que ver
con lo
que se anuncia en la sinopsis, personajes sin personalidad, previsible, y
decepcionante en su conclusión, que deja varias tramas sin cerrar de
forma satisfactoria. Quizá, interese a quienes sean incondicionales de
una autora que
escribe siempre la misma historia (“misterio” en varias épocas, una casa como elemento importante, personaje con infancia “dickensiana”, algún tipo de artista…), con diferencias superficiales. (Blog de D.C. Mendoza)